Un desayuno para recordar

Disfruté de cada mañana con un desayuno buffet delicioso y variado que me reenergizaba para el día. La ubicación cercana a Calton Hill facilitó mis exploraciones.

La presión de la ducha era molesta y la cama un poco pequeña para dos, lo que hizo que algunas noches no fueran tan cómodas como esperaba.

Las vistas desde las habitaciones eran impresionantes, realmente valen la pena.

La ducha tenía poca presión, lo que hizo que las duchas fueran menos agradables.

el desayuno no fue muy variado , pero la habitación estaba limpia y cómoda. la ubicación es excelente, cerca del centro. el personal fue muy atento , lo que hizo que nuestra estancia fuera agradable. 😊

Vistas impresionantes desde las habitaciones, instalaciones limpias y modernas, ubicación cercana a rutas de transporte público

La presión de la ducha, algo decepcionante!!! Esa puerta de baño de vidrio sin privacidad es realmente incómoda!!! Mejorar el control de la temperatura en las habitaciones sería ideal!!! noté que el ruido del plomería puede ser molesto.

Desayuno excelente con opciones personalizables.

La cama era muy justa para dos adultos, incómoda para descansar bien. Además, las reformas en el restaurante fueron un verdadero incordio, especialmente porque los ruidos se escuchaban en mi planta, interrumpiendo mi tranquilidad. Aunque el personal fue cortés, debieron advertirme sobre el menú limitado de la cena al momento de la reserva, ya que eso afectó mi experiencia durante las cuatro noches.

excelente acceso a atracciones y restaurantes en edimburgo

disfruté de una estancia increíble, ya que estaba a menos de 5 minutos a pie del famoso Calton Hill y muy cerca de Princess Street, lo que facilitó mis paseos por la ciudad y la exploración de lugares emblemáticos como la Catedral de St Giles y el Palacio de Holyroodhouse.

Asegúrate de preguntar sobre opciones personalizables en el desayuno, ya que ofrecen variedad más allá del menú limitado.

la habitación era espaciosa y cómoda, aunque el desayuno no siempre era suficiente.

Desayuno variado y amable personal.

Buen hotel para explorar Edimburgo

La ubicación es perfecta, a pasos de lugares increíbles. La habitación era amplia y tenía unas vistas geniales de la ciudad. Me encantó el bar del hotel, donde probé unos cócteles riquísimos. Sin embargo, la presión del agua de la ducha no fue muy buena. En general, disfrute mi estancia.

La ubicación del hotel es excelente, a unos 10 minutos a pie de Old Town. Las habitaciones son modernas y muy limpias, con camas cómodas, lo que facilita un buen descanso. Me gustó la variedad en el desayuno, estaba bien presentado y sabroso. Sin embargo, la presión de la ducha era baja, lo que resultaba un poco molesto. noté que el diseño del baño de vidrio no proporciona privacidad, lo que pudo ser incómodo. Tuve problemas con el ruido proveniente de los pasillos y las habitaciones vecinas, lo que interrumpió un par de noches de sueño. En general, el personal fue amable y servicial, aunque el servicio del desayuno fue algo lento en algunos momentos. A pesar de estos inconvenientes, disfrutar de la comodidad de la habitación y la cercanía a las atracciones principales compensó varias de las molestias.

fijo que volveré

El desayuno era increíble, con opciones variadas y sabrosas. La habitación estaba muy limpia y tenía un minibar y un escritorio cómodo. Los colchones eran excelentes, lo que hizo que descansáramos bien. El gimnasio era gratuito y muy accesible. Además, la ubicación era perfecta para explorar Edimburgo, a pocos pasos del Calton Hill.

Mi estancia fue muy buena. La ubicación resultó práctica, ya que todos los lugares que quería visitar estaban a pocos minutos a pie. Disfruté del desayuno, bien presentado con una buena selección de opciones. El personal fue amable y siempre dispuesto a ayudar. Me gustó que el ambiente del hotel era cómodo, ideal para terminar mis días explorando la ciudad.

Tuve un problema con el ruido en la habitación, que a veces me interrumpía un poco. La presión del agua en la ducha podría mejorarse.

Las habitaciones son tan amplias que podría organizar una fiesta de té para duendes y todavía tendríamos espacio de sobra. Además, la atención al detalle en la decoración es como si cada mueble hubiera sido elegido por un estilista. El restaurante, The Lantern Room, presenta una gama de platillos tan variados que me sentí como un explorador gastronómico, desde delicias locales hasta opciones internacionales que conquistaron mi paladar.

Ruido ocasional

Muy recomendable para parejas

La ubicación es simplemente perfecta, a solo unos minutos de todos los lugares que queríamos visitar. La atención del personal fue excepcional, especialmente cuando nos dejaron hacer un early check-in, eso marcó la diferencia para que pudiéramos empezar bien nuestras aventuras.

No fue barato, pero todavía fue aceptable.